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jueves, 31 de enero de 2013

DESDE MI CALLE


MONARQUIAS?

A las monarquías no les encuentro más uso que ser materia prima para chistes facilones, cuentos infantiles y revistas del colorín. Tomárselas más en serio conduce a la melancolía, cuando no a la ira y al envenenamiento de la sangre. Como muchos, celebraría su envío definitivo al desgüace de la Historia, pero mientras llega ese día (que no sé yo...) practico la limitación de daños, y hasta soy capaz de entretenerme con sus venturas y, especialmente, con sus desventuras, que de un tiempo a esta parte son casi todas.

Sigo también, nada a disgusto.., las historietas menudas de la regia condición, como el pase a la reserva de Beatriz de Holanda, y los inevitables paralelismos con la borbonada ibérica que nos han dejado caer. Con indisimulable sofoco, los papeles cortesanos - que igualmente son casi todos, incluidos los de muy cerca - se han apresurado a aclarar que los parecidos empiezan y terminan en las edades de los protagonistas, y en el hecho de que ambos sucesores están casados con plebeyas, término todavía al uso en estas rancias esferas. Da risa floja leer en la portada de un vetusto diario que la jubilación de la soberana del pais de los tulipanes, sigue "la tradición holandesa". Ojito con las traadiciones, que en la dinastía zarzuelera podría considerarse tal, que los hijos le birlen el trono a los padres por "la cara". Lo hizo Fernando VII con Carlos IV, y con la inestimable ayuda de Franco, el propio Juan Carlos le endiñó la trece-catorce a su viejo, que se fué al pudridero del Escorial sin haber catado la corona y, seguramente, acordándose del mal día en que engendró al rapaz que se saltó el escalafón.

Ya digo que ni me quita el sueño ni me importa un comino lo que ocurra con Los Capetos de este lado del Pirineo. Como pagano a escote del mantenimiento de su tren de vida, sólo les pido un poco más de espectáculo. Una abdicación a lo neerlandés o a lo hispanonistaní, no estaría mal.... para empezar.

Lo pienso DESDE MI CALLE, que es la calle de todos.