Entradas populares
-
San Maximiliano Kolbe Mártir Año 1941 Es este uno de los mártires modernos. Murió en la Segunda Guerra Mundial. Había sido llevado...
-
SAN MATEO
-
REFLEXIONANDO DESDE MI BUTACA Pienso que existe un duelo entre dos fuertes antagonismos: RAZON Y CORAZON. El CORAZON se alía con ...
-
¿DE QUE SE ENFADAN LOS POLITICOS? Mariano Rajoy tiene razón cuando afirma que vamos saliendo de la crisis poco a poco. El ejemplo m...
-
NACER DE NUEVO Mirando las imágenes de los cientos de miles de refugiados que pululan por las costas de Grecia, por Sicilia, por Mac...
-
FLUJO DE REFUGIADOS: UNION EUROPEA Y TURQUIA Da igual que los turcos hagan escabechinas con los kurdos. Da igual que su gobierno gire...
-
HOSPITALEANDO No hay como el hospital como para ponerle el termómetro en el sobaco a la sociedad. En sentido literal y figurado. Basta ...
-
IMPOSTORES Aunque ya no existen muchas cosas con las qué asombrarme, una de ellas ha sido la de ese joven, admirador de Alejandro Ag...
-
11 de marzo 11 de marzo, un fecha que remueve desde hace 12 años el corazon de los ciudadanos de éste país. Una mañana cual...
martes, 30 de septiembre de 2014
DESDE MI CALLE
OJO POR OJO Y DIENTE POR DIENTE
Hace unos días hablando con un conocido salió el tema del conflicto entre los israelíes y los palestinos. Decíamos que era el "eterno" conflicto. Porque los dos, que ya tenemos una cierta edad, recordamos casi de siempre las noticias en los medios de comunicación sobre el tema. Parece que no para. Y que a toda acción de unos sucede siempre la reacción de los otros, y así siguen y siguen. Se me ocurrió comentarle que, a mi modo de ver, nunca pararían hasta que uno de los dos - mejor ciertamente los dos - no aprendiese a perdonar. Así de simple. Por ahora lo que hacen es aplicar la ley del talión: "ojo por ojo y diente por diente". La consecuencia natural será que algún día todos se queden ciegos y desdentados.
Ese es el efecto habitual cuando nos sentimos heridos y pensamos que la venganza es el único remedio. Porque los del otro lado también se van a sentir heridos y van a pensar lo mismo. Y cada vez la reacción será mayor. Y al final ya sabemos...: todos ciegos.
La respuesta debe de ser detener la espiral de violencia. Dialogar y comprender al otro debe ser el camino. Lo que hacen los otros nos puede parecer a veces que está mal hecho, pero tampoco intentamos conocer exactamente los porqués y las razones. Quizá ... siempre quede la duda. Y ante la duda es mejor perdonar y seguir el camino. Quizás así nos iría mejor en las relaciones con los otros. ¿Qué tal si miramos a probar a los que nos rodean y ver en ellos lo más precioso de sus vidas? Después de tantos años de probar con el rencor y la venganza, creo que vale el escuchar al otro y entre todos conseguir, a través bien del perdón o de la mutua comprensión, dejar de poner en práctica ése lema del ojo por ojo y diente por diente.
DESDE MI CALLE, que sigue siendo la calle de todos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)