Entradas populares
-
San Maximiliano Kolbe Mártir Año 1941 Es este uno de los mártires modernos. Murió en la Segunda Guerra Mundial. Había sido llevado...
-
SAN MATEO
-
REFLEXIONANDO DESDE MI BUTACA Pienso que existe un duelo entre dos fuertes antagonismos: RAZON Y CORAZON. El CORAZON se alía con ...
-
¿DE QUE SE ENFADAN LOS POLITICOS? Mariano Rajoy tiene razón cuando afirma que vamos saliendo de la crisis poco a poco. El ejemplo m...
-
NACER DE NUEVO Mirando las imágenes de los cientos de miles de refugiados que pululan por las costas de Grecia, por Sicilia, por Mac...
-
FLUJO DE REFUGIADOS: UNION EUROPEA Y TURQUIA Da igual que los turcos hagan escabechinas con los kurdos. Da igual que su gobierno gire...
-
HOSPITALEANDO No hay como el hospital como para ponerle el termómetro en el sobaco a la sociedad. En sentido literal y figurado. Basta ...
-
IMPOSTORES Aunque ya no existen muchas cosas con las qué asombrarme, una de ellas ha sido la de ese joven, admirador de Alejandro Ag...
-
11 de marzo 11 de marzo, un fecha que remueve desde hace 12 años el corazon de los ciudadanos de éste país. Una mañana cual...
martes, 10 de diciembre de 2013
DESDE MI CALLE
MAS CONSUELO Y MENOS CONDENAS
¿A qué se deberian dedicar los gobernantes? A gobernar. ¿En qué deberían emplear su tiempo? Básicamente en tres cosas: Intentar conseguir constantemente una vida mejor para sus gobernados, perdonar a todas horas si les cuesta conseguirlo y consolar mientras se esfuerzan en hacerlo. Es decir, hablar, perdonar y consolar.
Los que están llenos de responsabilidad, ni maldicen, ni reniegan ni condenan. Lo que les sale es lo contrario: "consolad/consuelen". Es lo que deberían hacer con más frecuencia, consolar, llevar más amor, dar buenas noticias. Porque en este mundo de hoy, nuestras realidades, necesitan más palabras de consuelo y menos palabras de condena. Hay que amar nuestra realidad y nuestro mundo, también con sus negatividades (y las nuestras personales) que tenemos que aceptar. Pero hemos de recordar cada vez que nos levantamos por la mañana que no sólo el amor es capaz de transformarlo todo. Necesitamos más consuelo y menos condenas.
Deben comprender que no les comprendamos. Deben aceptar que no les reconozcamos. Mirar a esta realidad nos ayuda a aceptar esos momentos en que no somos reconocidos ni comprendidos. Los que no son reconocidos son aquellas personas que sufren en propia carne los castigos del hambre, de la violencia en todas sus formas, de la injusticia en todas sus extorsiones. Que la defensa de los derechos de los no comprendidos sea un estímulo para seguir trabajando en la realidad de esos mínimos derechos, especialmente en toda esa población que todavía no disfruta de ellos, de los excluidos del sistema
DESDE MI CALLE, que es la calle de todos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)