DESDE MI CALLE

YO QUIERO SER FRANCES....

Yo quiero ser francés y no sé por qué. Desde luego no es porque tengan la antena de radio y la televisión más famosa del mundo, que no. Ni por el "francés". Ni porque hablan como en las películas de "Robespiegg". Quiero ser francés a tontas y loca, así, de pronto. Y la razón no es porque me guste el queso oleroso ni untar la "baguet con paté a las fines herbes", ni la "Nouvelle cuisine francaise", cuyo lema, mundialmente conocido, es "Nada en el plato, todo en la factura". No es por eso, no. Yo quiero ser francés porque me lo pide el cuerpo. Es un impulso, un anhelo.No sé cómo definirlo, pero es así.
Y eso que Francia está lleno de franceses, hay que reconocerlo. Si ustedes visitan el país ya saben a qué me refiero. Ese mirar por encima del hombro, ese tono despectivo, ese trato disciplente como si hablaran con alguien que viaja para ver películas eróticas (lo hicimos, lo hicimos). Bueno, pues a pesar de todo quiero ser francés.
Creo que tampoco es porque inventaran la guillotina (la Inquisión utilizó la hoguera, la rueda, etc.), ni por la resistencia en la ocupación nazi, ni el mayo francés del 68, Asterix y Obelix, Louis de Funes, Sartre o Zidane. !!Qué va!!. Yo quiero ser francés porque están vivos. Porque LUCHAN POR SUS DERECHOS. Porque salen a la calle y no esperan en su jaula a que les caiga la subvención del alquiler, el bebé o el piso de las VPO para complementar los 1.000 euros miserables. Yo quiero ser francés, pero como los franceses, eso sí.

Mientras paseo, pienso en ésto DESDE MI CALLE, que es la calle de todos.