PIO DE PIETRELCINA
(1887-1968)
Francisco de Forgiones nació en Pietrelcina., en el sur de Italia. Desde niño se le apreció una salud quebradiza; logró ingresar entre los capuchinos.
Se ordenó sacerdote y desarrolló su actividad evangélica en San Giovanni Rotondo (Apulia). A los 28 años le aparecieron los primeros estigmas en ambas manos, heridas que él cubría por timidez; sin embargo los médicos desconocían su origen.
El pueblo acudía al monasterio a confesarse con el Padre Pío, o llegaban de forma masiva cuando él celebraba la Misa. Tanta veneración tuvo en vida, que pasaba la mayor parte del tiempo en la soledad de la celda, evitando a los fieles y a la prensa.
Su canonización en la plaza de San Pedro fué una de las mayores concentraciones de personas, y su tumba en San Giovanni Rotondo es uno de los centros de peregrinación más importantes de Italia.
Se le presenta con el hábito franciscano o celebrando la Eucaristía.
PIO DE PIETRELCINA fué canonizado en la plaza de San Pedro, Italia. Parece que llevaba en su interior la santidad; con mucha discreción se escondía las manos para que no se viera los estigmas que daban fé de su santidad.
ResponderEliminarAmigo Miguel Ángel, este santo diría yo que, és de estos tiempos, ya que no es muy habitual.
Un abrazo.