LO QUE ENSEÑA EL MUS
Está claro, Mariano y Soraya no saben jugar al mus. Llevo tiempo advirtiéndolo.
El riesgo más grave de la situación catalana consistía en que acabara resolviéndose a favor de los independentistas por la vía de lo que en el mus se llama "la muerte dulce". Una pareja va por delante en el tanteador y está peligrosamente cerca de los OCHO amarrecos (CUARENTA tantos o piedras). La pareja rival, sensiblemente por detrás, tiene a su alcance forzar un desenlace rápido por la vía de los ÓRDAGOS, en cada uno de los lances del juego. Pero no se atreve a arriesgar y varios de los lances quedan en PASO. La pareja que lleva ventaja alcanza los OCHO amarrecos y gana.
Al gobierno de Rajoy sólo le quedaría la declaración del estado de sitio que implica una autoridad militar para Catalunya y exige un acuerdo por mayoría absoluta en el Congreso, inalcanzable sin el apoyo del PSOE de Sánchez, aunque también podría tomar otras decisiones.
Lo dicho, la muerte dulce. Los órdagos tienen que formularse necesariamente antes de que el rival, piedra a piedra, se haya salido. Después no sirven.
DESDE MI CALLE que sigue siendo la calle de todos, o de casi todos.
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