Ermita de la Santa Cruz - Bizkaigane |
SUBIR HASTA LA ERMITA DE BIZKAIGANE.
Salgo temprano, cuando aún el sol no ha salido. Mi intención era el subir por el Camino de Santiago, pero he desistido por las lluvias y vientos de este invierno, que han debido de dejar el camino impracticable. Por un camino entre arboles y caserios, con un riachuelo en la parte derecha, atravieso el barrio de Zallo, para llegar a la carretera que me llevará hasta la población de Rigoitia, destino de esa parte del Camino de Santiago.
Vista del barrio de Zallo |
Comienzo a subir. La distancia, en continua ascensión es de 6 kmts. Serpentea la carretera entre árboles, haciendo continuas eses que facilitan un paso rápido. Entre claros veo cómo Gernika, va quedando a mi izquierda, y en las laderas se van multiplicando los caseríos. Es tierra de labranza, fértil, regada por riachuelos que van a parar a la ría de Oka, o, también llamada, de Gernika. Así, subiendo a buen ritmo diviso ya la localidad de Rigoitia.
Población de Errigoiti |
Desde Errigoiti y dejando a mi derecha su Ayuntamiento y el núcleo de sus viviendas, comienzo a subir hasta Metxikas. Metxikas es uno de los barrios de Rigoitia, el más poblado de ellos. Son 2 kmts.de subida, con un comienzo muy empinado. Según van pasando los metros, la pendiente se hace cada vez mayor. La subida, aunque corta y con un buen piso. es muy dura en su conjunto. Discurre entre pinos que en algunos lugares hace que el camino sea bastante sombrío. En la última curva, y resoplando por el esfuerzo, se ve ya el cruce que, por la izquierda, me llevará hasta la ermita de Bizkaigane. Aquí el camino ya no es tan duro y si muy hermoso. La distancia es de 1 kmt. y la ermita está en una pequeña cima. Al llegar a ella, me siento en las escaleras de la ermita, y descanso. La vista es fantástica. Creo que habrá pocas como ella. Al frente está el Sollube y un poco más a la derecha se vislumbra Bermeo. A la izquierda está el valle de Asúa, una de las entradas a Bilbao. Durante el verano, y en días claros, se puede ver "la boina" con que la contaminación cubre la capital de Bizkaia.
Barrio de Metxikas. |
Una vez descansado, regreso al cruce de Metixkas. He decidido bajar hasta Gernika por Lumo. Comienzo el regreso Al principio tengo que subir por una loma, dejando Rigoitia a mi derecha. Es una senda por donde no pueden circular vehículos por lo estrecha y empedrada que es. Una vez subida la misma, donde por cierto hay un caserío que atravieso bajo la atenta mirada de un perro que, inexplicablente, no me ladra, comienza la bajada. Pienso que mi rodilla va a sufrir, pues todo lo que he subido lo tengo que bajar, y además con menor kilometraje. La primera prueba, para mis piernas, es una bajada infernal, da la sensación que llegas hasta "el infierno". Respiro cuando llego abajo. Desde ese punto, ya es mucho más suave la susodicha bajada. Llego a una subestación eléctrica, pequeña, cerrada ya hace muchos años, y que me seirve de guía para darme cuenta del tramo que me queda hasta llegar a Lumo. Está situado este lugar, asafaltado últimamente, en el Barrio San Pedro.
caserío en el Bº San Pedro |
A partir de este momento, la bajada se hace mucho más cómoda, tanto por su porcentaje, como por el asfaltado del camino. Ya entre claros, veo la anteiglesia de Lumo. Los ultimos 300 mts.son de una bajada más pronunciada pero muy asumible. Por fin llego a Lumo.
La primera mención de la anteiglesia de Lumo data de 1051 en un cartulario de San Millán de la Cogolla. En terrenos de ésta anteiglesia, el Conde Don Tello de Castilla fundó el 28 de Abril de 1366 la villa de Gernika. Los continuos conflictos sobre límites territoriales entre Gernika y Lumo llevaron a la unión entre ambas, con gran reticencia por parte de la anteiglesia. Se cuenta que el día de la unión, el entonces alcalde de Lumo, al grito de "viva la anexión" del alcalde de Gernika, respondió con un "vivala".
Iglesia y nucleo urbano de Lumo. Cruce dirección Gernika |
Descanso en los soportales de la Iglesia. Desde alli, y en la parte trasera, se divisa la zona en la que habito. Una vez descansado, y habiendo bebido un trago de agua fresca en una fuente alli existente, comienzo la bajada a Gernika, tomando en el cruce la parte izquierda. La bajada es curiosa. Antiguamente, en mi juventud, se hacia el Viernes de Cuaresma, un Via Crucis desde la iglesia de Gernika hasta ésta de Lumo. La recorrido del Via Crucis estaba señalizado con cruces que representaban las catorce estacione. Hoy en día ya no se celebra, pero siguen existiendo aquellas cruces. En ésa época, todas las esquinas de la subida por la que transcurría el Via Crucis estaban repletas de gente. Aprovechábamos éste "acontecimiento", que si que lo era, para después de la subida, comer en la plaza. El bacalao era plato único, pues el Viernes Santo era un día de ayuno y abstinencia, en el que no se debía comer carne.
Bueno siguiendo, con mi recorrido, y después de rememorar todo lo anterior, consigo llegar hasta la iglesia de mi pueblo, que es donde acaba esta bajada. Poco antes de llegar, hay un pequeño mirador, al que se le llama Cuatro Bancos, no hace falta el decir el porqué, donde, por lo menos antes, solían acudir las parejas, casi siempre al anochecer, a hacer...manitas..o ... Desde allí hasta mi vivienda únicamente son 10 minutos atravesando la parte este de Gernika.
He llegado a casa. Ha sido una caminata algo dura. He subido muy alto hasta la ermita de Bizkaigane, y bajando por Lumo, he finalizado la misma. Me siento satisfecho, aunque deseando darme una buena ducha, y un buen desayuno para recuperar fuerzas.
Hoy desde mi pueblo, deseo a todo el mundo PAZ y no GUERRA, FELICIDAD y no MISERIA.
Con tu relato, me llego a cansar yo también, es genial como lo describes, como lo 'sufres' y como lo disfrutas'.
ResponderEliminarGracias amigo Miguel Ángel
Todos tus paseitos mañaneros son gratificantes amigo Miguel Ángel, aunque recorrer todas las mañanas unos 15 ó 20 kmt,.a tu edad debes de tener una fortaleza extraordinaria en las piernas. Te envidio como disfrutas de la belleza de la naturaleza, de riachuelos, bosques, senderos, aldeas o pequeños pueblos y de esas inmensas praderas verdes. Gracias Miguel Ángel por describir tan bien esa ruta maravillosa, pero, como dice Javier, estoy cansado por el largo recorrido que me has hecho,leer.
ResponderEliminarUn abrazo.